Raleigh, N.C. – La Unión Americana de Libertades Civiles de Carolina del Norte (ACLU-NC) y el Centro de Justicia de Carolina del Norte (NCJC) presentaron una petición 150B-4 para una sentencia declaratoria ante la División de Vehículos Motorizados de Carolina del Norte, del Departamento de Transporte de Carolina del Norte (DMV, por sus siglas en inglés) solicitando que la DMV aclare su política y procedimientos en torno a la emisión de licencias de conducir a personas no ciudadanas que están presentes de manera legal y que califican para recibir licencias de conducir bajo la ley estatal. La DMV ha estado denegando injustamente las licencias de conducir o ha proporcionado licencias de conducir de término limitado a personas no ciudadanas residentes de Carolina del Norte. Esta práctica ilegal e inconstitucional está causando daño profundo e interfiere con la capacidad de muchos residentes de Carolina del Norte para cuidar de sus familias y realizar actividades necesarias para la vida diaria.
“A pesar de su elegibilidad legal clara para obtener licencias de conducir de término completo, las DMVs de Carolina del Norte han denegado licencias de conducir o han proporcionado inapropiadamente licencias de conducir de término limitado”, dijo Muneeba S. Talukder de la ACLU de Carolina del Norte. “Estamos pidiendo que la DMV emita una sentencia declaratoria que se ajuste a la ley y a las constituciones de los EE. UU. y de Carolina del Norte y que provea una orientación clara a su personal para que nuestros clientes y otros residentes inmigrantes de Carolina del Norte puedan continuar realizando sus obligaciones diarias”.
En Carolina del Norte, más del 90 por ciento de la población depende de sus vehículos para ir a trabajar y la capacidad de conducir es una parte esencial de poder navegar el diario vivir. Las denegaciones inapropiadas de licencias por parte de la DMV le han hecho daño a muchos inmigrantes presentes de manera legal como nuestros clientes. Nuestros clientes no han podido mantener empleo estable, y han tenido dificultades para manejar hacia sus citas médicas, sus responsabilidades de cuidado familiar, y otras obligaciones.
“Las consecuencias de que la DMV no haya emitido licencias a inmigrantes que están presentes de manera legal afectan en mayor medida a los residentes de bajos ingresos y de áreas rurales de Carolina del Norte, quienes con frecuencia no tienen los recursos para pagar por servicios costosos de viajes compartidos y no tienen acceso al transporte público”, dijo Kate Woomer-Deters, abogada sénior en el Centro de Justicia de Carolina del Norte. “La pérdida de una licencia de conducir puede ser catastrófico financieramente así como también causar desafíos serios para las personas de Carolina del Norte y su capacidad para cuidar de sí mismos y de sus familiares”.
Las denegaciones ilegales de las licencias de conducir a inmigrantes que de otra manera son elegibles para conducir también abre la posibilidad real de que los inmigrantes están siendo canalizados y dirigidos al sistema legal penal. Los inmigrantes buscan obtener sus licencias de manera legal, pero cuando se les deniega y deben manejar para cumplir con sus obligaciones diarias, se enfrentan con consecuencias potencialmente penales por conducir sin licencia.
Nuestros clientes están entre los muchos inmigrantes en Carolina del Norte que están siendo potencialmente impactados por las prácticas de denegar licencias de término completo y en algunos casos denegar incluso las licencias de término limitado.
La ACLU de Carolina del Norte, junto a otras organizaciones de los derechos civiles, ya presentó una demanda en contra de la DMV (Johnson v. Goodwin) cuestionando las prácticas de la DMV de revocar las licencias a las personas que no pueden pagar sus multas por infracciones de tránsito.
###